CAPITULO II. Fuerza & Agresión.
Aplicación de la Teoría de las Seis Lecturas (Cómo enseñar a leer y a escribir ensayos) Miguel De Zubiría Samper. Al Libro Sociedad Cultura y Violencia. Enciclopedia Latinoamericana de Sociocultura y Comunicación Muniz Sodré Grupo Editorial Norma. Capítulo II Fuerza y Agresión.
Numero de párrafos: 32.
Nivel Cero. Motivación.
En la lectura del texto Sociedad, Cultura y Violencia escrito por Muniz Sodré. Se realiza un acercamiento en el segundo capítulo frente a las prácticas lingüísticas cuando se designan actos de coerción socialmente legitimados. Expresado desde el primer párrafo cautiva y deja la espina para continuar con el desenvolvimiento de la lectura y conllevarlo a los diferentes contextos.
Nivel I. Fonética.
Connotar Flexible Indecisión
Excitación Reivindicatoria Retraimiento
Destructividad Exacerbado Etrocidios
Nivel II. Decodificación Primaria.
Sinonimia:
Connotar. Implicar Entrañar Sugerir
Retraimiento. Recogimiento Inhibición Encierro
Implícitamente. Tácitamente Expresamente Implícita
Radicación.
Auto-destrucción propio destrucción
Disciplinamiento Disciplina Acción y efecto.
Contextualización.
Fuerza. Para designar la imposición de un orden social gobernado por una minoría.
Violencia. Tiende a la destrucción de un “orden social”. Todo tipo de acción que resulte en daño serio para la vida social o sus condiciones materiales, incluso tomando en consideración el aspecto del fenómeno.
Chiaraje. Nombre derivado de la aldea donde se realiza la confrontación.
Galeras. Agrupamientos colectivos.
Áreas liberadas. Donde no entran extranjeros y predominan jóvenes vestidos con ropas de cuero, borceguíes y símbolos nazis.
Violencia Ritualizada. Es resquicio de una lógica social que erige como imperativos la honra y la venganza, que son códigos de sangre y expresan el poder del holos sobre toda la acción individual.
Holos. El todo comunitario.
Agresividad. Es la fuerza resultante de la disposición espontánea del ser vivo.
Agresión. Implica “hostilidad destructiva”, o sea, la forma conflictiva por la violencia.
Frustración. Bloqueo objetivo que no permite al individuo lograr un fin establecido.
Pulsión de muerte. Cuya finalidad es la autodestrucción del sujeto.
Sado-masoquista. Pulsión de dominación y sumisión.
Furia narcisista. Es un fenómeno específico en el interior del extenso campo psicológico de la agresión, de la rabia y de la destructividad.
Situación primitiva. Se refiere a los aspectos originarios o arcaicos de la conciencia y no a cualquier vestigio antropológico de las sociedades tradiciones, llamadas, a veces “primitivas” o “salvajes”.
La contención de la violencia. Solamente se instituye con la moral moderna, cuyos valores se orientan en el sentido del respeto formal a la persona humana y de una especie de condescendencia piadosa con los más débiles.
Léxico.
Coercitivo. Sirve para forzar la voluntad o la conducta de alguien. Represivo.
Resolución. Decreto, providencia, auto o fallo de autoridad gubernativa o judicial.
Secularizar. Condición común de lo laico en contraposición a lo eclesiástico.
Mediática. Perteneciente o relativo a los medios de comunicación.
Resquicio. Coyuntura u ocasión que se proporciona para un fin.
Xenofobia. Odio, repugnancia u hostilidad hacia los extranjeros.
Erige. Dar a alguien o algo un carácter o categoría que antes no tenía
Holístico. Doctrina que propugna la concepción de cada realidad como un todo distinto de la suma de las partes que lo componen.
Fratricida. Persona que mata a su hermano.
Libido. Deseo sexual, considerado por algunos autores como impulso y raíz de las más varias manifestaciones de la actividad psíquica.
Pulsión. En psicoanálisis, energía psíquica profunda que orienta el comportamiento hacia un fin y se descarga al conseguirlo.
Nivel III. Decodificación Secundaria.
Cromatización. (Conectores)
Tanto En verdad Asi
De un modo Para En efecto
Así como Si de un lado Como bien
Observa Cabe Mientras tanto
Por el otro Por lo tanto.
Inferencia Proposicional. Superestructura.
Las motivaciones individuales corresponden tanto a factores místicos como identitarios.
Áreas llamadas “Liberadas” donde no entran extranjeros y predominan jóvenes vestidos con ropas de cuero, borceguíes y símbolos nazis.
La xenofobia ayuda a compensar psicológicamente la desorientación de jóvenes y viejos de cara al vacío cultural dejado por la unificación política de Alemania y por el desvanecimiento de los valores comunistas.
La violencia, la agresión, se enraízan tan profundamente como la propensión amorosa o sexual en la composición psicobiológica del ser humano.
Agredir a alguien sería, así, garantizar imaginariamente la propia supervivencia, transfiriendo la muerte al otro.
Agredirse a sí mismo implicaría dirigir hacia dentro la pulsión destructiva.
El agredido es concebido como fuente autónoma de impulsos y despierta rabia, porque es otro, quien impide la satisfacción de los deseos narcisistas (integrados a la realidad) de alguien, o simplemente impide la consecución de finalidades específicas.
La contención de la violencia solamente se instituye con la moral moderna, cuyos valores se orientan en el sentido del respeto formal a la persona humana y de una especie de condescendencia piadosa con los más débiles.
Una cierta sociología (a veces, sociobiología) insiste en limitarla conceptualmente al campo de la agresión (física o verbal), entendida como reacción instintiva de los animales en determinadas situaciones.
Nivel IV. Decodificación Terciaria. (Macro-proposiciones).
Cabe modernamente a la disciplina, entendida como la regularidad de la conducta por presión, tanto externa como interna, sustituir el empleo de la fuerza física.
La contención de la fuerza bruta por las variadas formas disciplinares solamente se realiza con constancia, o, por los menos con mayor constancia, en los espacios plenos de la modernidad.
Después de consolidar la acumulación económica imprescindible para la expansión de su producción industrial es que el Estado moderno pasa a concentrar el empleo de la fuerza bruta y a generar ideologías, jurídicas y psicológicas, de disciplinamiento de las conductas y liberalización de los gobiernos.
Nivel V. Tesis General.
La violencia social apenas connota negativamente las acciones que contrarían la legitimidad, burguesa o no, del grupo dirigente.
Nivel VI. Meta-semántico.
El proceso de agresión por parte del Estado es enmarcado no solo en el campo de lo legítimo sino de lo legal, legitimo por ser el ente “de funcionarios capaces para coordinar el Estado” y legal por estar camuflado bajo políticas constitucionales que abrigan la clase dirigente. Es pues la violencia legitimada la cual permite los procesos de sumisión y esclavitud en la cual la sociedad es reprimida de ser liberada del yugo capitalista que absorbió todas las instituciones Estatales, hasta las de carácter social.
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